31.8.06

El mensajero

:
Un coloquio sobre Henríquez Ureña en el Colmex, de esos que te dejan con tedio. Luego correr a la redacción y atascarse en el camino. Siempre la lluvia pone tonta a la gente, y el taxímetro, el pinche, no se detiene. Tengo nota pendiente sobre la cocina de Frida y el diente de Diego. Me cuenta su hija que el panzón adoraba el clemole de Oaxaca. ¿El qué?... La nota me gustaba hasta que me vienen con que ya no hay tiempo, que vaya a un cyber, que hoy cerramos temprano y que mi nota, la de Frida, va indiscutiblemente para mañana. Ni modo, me bajo del taxi, prendo un cigarro, busco el cyber y a redactarla. Empiezo bien y ¡mocos! La lluvia tumba por un segundo la luz de la colonia. Ni modo, me digo, y me lanzo de nuevo. Al fin que termino y me voy a la redacción por si hay que hacer correcciones. ¡La shit!, apenas llegó y ¡tómala! “Hubo cambios, tu nota no va para mañana”... Decido entonces prender un cigarro.

Y ahora voy en el micro. El chofer lleva pila, reguetón y es un desquiciado. De todos modos me subí por eso, los micros neón que parecen antros un poco hasta me relajan. Abro el libro que tomé en la redacción, de esos que nunca se cubren y que después nadie quiere. ¿Poesía? ¿Quién quiere? David Rosenmann-Taub escribe el siguiente epígrafe, aviso, dedicatoria, o lo que sea del tipo:

Papá,
tres días antes de marcharte,
me pediste que te prometiera que revisaría
El Mensajero
hasta crear el más hermoso
-real- libro.

Cumplir la promesa me ha exigido
cumplir tu edad.

Y me da el escalofrío, el corazón se estruja. ¡Mierda! He de andar bien, pero bien, sensible..

27.8.06

Rogelio

:
Ir a la presa cansa mucho, eso es verdad. El camino es llano y la falta de cerros nos cansa demasiado. Hace calor y convencimos a mi tío. Ir en yip es otra cosa y el llano no es cansado. Se nos cruza gente, a veces, que viene desde el pueblo. Piden rai y les ahorramos el camino. Esta vez se subió Rogelio, que es más grande que nosotros pero va en primero de primaria. Dice Rogelio que ha cruzado a nado el largo de la presa. Nosotros le creemos porque somos chicos. La presa es peligrosa, eso nos dicen. Hay plantas submarinas o seres que despiertan y te amarran del tobillo. De eso nadie se da cuenta porque todo pasa abajo. De Rogelio no nos dimos cuenta. La gente lo buscó tres días, y ya despúes no preguntamos..

17.8.06

La izquierda está desnuda
*
El grito verdadero, de Salvador Salazar (1996)

13.8.06

:
¿Cuál es la primera ley de la termodinámica? -dijo Tom-. No se puede transferir calor de algo frío a algo caliente. Jamás he recibido muestras de calidez de mis vecinos, así que supongo que es cierto..
Jeanette Winterson

12.8.06

:
Una sombra en el agua:
un monje sobre el puente.
“Reverendo, ¿a dónde va?”
Se fue el monje sin palabras
señalando con la mano la nube.
*
Poema anónimo / Dinastía Chosun / 1393-1910

9.8.06

:
Estaba decidido a postear algo sobre un monstruo, pero no, borré la entrada. Hablar mal de la gente (aunque no sea gente sino un monstruo) siempre trae mala vibra. Hoy me vino la mala vibra mientras posteaba y mi boca se me puso de a centavo. Odio el mundo, la verdad, porque no da permiso de odiar sin que te devuelva en un segundo el mismo odio. Muchos odian y nada pasa, pero yo tengo la mala suerte que odiar se me revierte mala onda. Los dejo un rato, mejor, y ya vuelvo otro día con otra cosa..
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