Este poema como poema me gusta, como realidad me escalofría. Para nosotros los cuerpos se complementan, algo así como "concavo y convexo" ya has oído a tu papá ¿verdad?
Yo diría que los cuerpos muertos, EDUARDO EL TERRIBLE, ojalá pudieran de nuevo abrazarse. O no? El letargo sería incluso más ameno, calentito. Saludos.
Maese ANDREAS, tienes razón. Tenía abandonados los versos en la Lumbre. Pero ya llegaron. Siguen vivos, y bien rojos. Pero dime, ¿cómo olvidarse de bloggear materia viscosa si los actos no son más que viscosidad (y otras cositas). Oyes, y una disculpa. Apenas hoy entré a mi correo y me encuentro con la invitación. Carajo! Pinche arrastre tan raro de mi suerte :S Un gran saludo. Ya nos inventaremos otra ocasión. ... Y replica, replica!!! El que no replica nada gana.
ALMA, entonces apa cochecito el que nos cargamos.
Jaja, BARDAMU, ese código, pa que veas, no me dice nada :D
Jeje, MADRE, sí que lo he escuchado. Entre Roberto Carlos y el poema ése de cóncavo y convexo lo miro replegarse. Besos ;)
La verdad, BÍ MÁT, no debe ser tan malo. Incluso dicen, creo que lo dice saramago, que aquel vinagre que se le dio a Cristo no era tal. O séase que en lugar de vinagre era una bebida hecha a base de vinagre, que en aquella época se usaba mucho para refrecarse. Digamos que era la coca cola bien fría que se consumía por las tierras del Gólgota. Pero ni modo, la historia la escriben los vencedores, y el pobre personaje que le dio vinagre a Cristo en lugar de ángel resultó un diablo. Por eso digo que eso de cricificarse en vinagreta no debe estar tan mal.
Así es, don FERNANDO, pero pus qué le vamos a hacer.
Profecías, mangos, Mr. LATAS. Eso no es. Ni siquiera existe.
Comunión de sangre, camarada MONO.
;) Thnks mi buen SERGIO ;)
Okas, G. KLEINE, déjame pensar a ver qué otra aberración pongo :D
Crucificados en un madero verde, para abrasarse despacito. Un beso, Tristán. Te cuento que San Charbel me concedió ya la mitad del milagro, así que le atiné en el color de la cinta. Ahora tengo que llevársela para que me cumpla la otra mitad.
Si conseguimos volvernos incorruptos sí, mi buen BRO.
¿Verde? Qué dolor, LO-QUE-SERÁ. No sólo será soportar la quemazon de la piel, si no escuchar la quemazón del pobre madero verde. ... ¿San Charbel? Jeje. ¿Y sí fue azul?
16 Comments:
Muy bueno, compadre. Un abrazo.
Que diablos, en estos momentos no me importaría un poco de vinagre...
Los cuerpos que han muerto
No piden ya nada
Estan frios
Nunca se abrazan
No pueden
No deben
Salud Don Tristan
Es la intención la que agria, la que espina, la que crucifica. El cuerpo es el vehículo.
De tal crucifixión de los cuerpos se asoma la perfecta comunión.
Saludos y...
kkurwfze
(código verificador antiespam)
Este poema como poema me gusta, como realidad me escalofría. Para nosotros los cuerpos se complementan, algo así como "concavo y convexo" ya has oído a tu papá ¿verdad?
Hay momentos en que el amor se convierte en algo muy cruel. Abrazos.
será que nos gusta espinarnos.
sufrir.
llorar.
mejor sigo solo.
parece que este año la profecía de estar sin pareja será cierta.
y ha sido difícil. este año no moriré crucificado
Sea la crucifixión el amplio perdón para los amantes. Mira las espinas de su piel, se aman, no cabe la menor duda.
Abrazos amigo.
bravisimo.
Wuooo...seguid, que el hambre por leer sigue!
Thnks mi buen ALEJÓN :D Abrazos.
Yo diría que los cuerpos muertos, EDUARDO EL TERRIBLE, ojalá pudieran de nuevo abrazarse. O no? El letargo sería incluso más ameno, calentito. Saludos.
Maese ANDREAS, tienes razón. Tenía abandonados los versos en la Lumbre. Pero ya llegaron. Siguen vivos, y bien rojos. Pero dime, ¿cómo olvidarse de bloggear materia viscosa si los actos no son más que viscosidad (y otras cositas). Oyes, y una disculpa. Apenas hoy entré a mi correo y me encuentro con la invitación. Carajo! Pinche arrastre tan raro de mi suerte :S Un gran saludo. Ya nos inventaremos otra ocasión. ... Y replica, replica!!! El que no replica nada gana.
ALMA, entonces apa cochecito el que nos cargamos.
Jaja, BARDAMU, ese código, pa que veas, no me dice nada :D
Jeje, MADRE, sí que lo he escuchado. Entre Roberto Carlos y el poema ése de cóncavo y convexo lo miro replegarse. Besos ;)
La verdad, BÍ MÁT, no debe ser tan malo. Incluso dicen, creo que lo dice saramago, que aquel vinagre que se le dio a Cristo no era tal. O séase que en lugar de vinagre era una bebida hecha a base de vinagre, que en aquella época se usaba mucho para refrecarse. Digamos que era la coca cola bien fría que se consumía por las tierras del Gólgota. Pero ni modo, la historia la escriben los vencedores, y el pobre personaje que le dio vinagre a Cristo en lugar de ángel resultó un diablo. Por eso digo que eso de cricificarse en vinagreta no debe estar tan mal.
Así es, don FERNANDO, pero pus qué le vamos a hacer.
Profecías, mangos, Mr. LATAS. Eso no es. Ni siquiera existe.
Comunión de sangre, camarada MONO.
;) Thnks mi buen SERGIO ;)
Okas, G. KLEINE, déjame pensar a ver qué otra aberración pongo :D
Pero no deben abrazarse, la descomposición se confundirá, no se sabrá como fué.
Crucificados en un madero verde, para abrasarse despacito. Un beso, Tristán.
Te cuento que San Charbel me concedió ya la mitad del milagro, así que le atiné en el color de la cinta. Ahora tengo que llevársela para que me cumpla la otra mitad.
Si conseguimos volvernos incorruptos sí, mi buen BRO.
¿Verde? Qué dolor, LO-QUE-SERÁ. No sólo será soportar la quemazon de la piel, si no escuchar la quemazón del pobre madero verde. ... ¿San Charbel? Jeje. ¿Y sí fue azul?
uuuoooooooouuuuuu
sssssss
quiero ese libro!
donde lo compro o que tengo que hacer?
je je
un abrazo!
Thnks, Opphelia :D
El próximo año sale. Pero si quieres te mando una copia y listo ;)
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