24.1.06

2 TOROS 2

Agárrate, Chigna; te llueven cardos
Sábado 28, presentación de Cardo, 5 años, Poesía
Chignahuapan, Puebla
*
Y además, como segundo toro, toro-hembra que enviste las tinieblas, la presentación del Noveno río, libro de mi mentora Raquel Olvera (también en Chignahuapan, obvio, su matria)

13 Comments:

Blogger Tristán said...

Será?

Naaa!!!

enero 25, 2006 1:46 a.m.  
Blogger wakko said...

5 años no lo puedo creer!!!!!

enero 25, 2006 7:47 a.m.  
Blogger Lo-que-serA said...

¿Va a ir? ¿verdá que sí va a ir?

enero 25, 2006 11:56 a.m.  
Blogger Tristán said...

Así es, mi WAKKO. 5 años sopenado letras en copitas de vino. Ajúa.

Claro, LO-QUE-SERÁ. Allí estaremos. Y ora sí no se escapa de mis abrazos.

enero 25, 2006 2:54 p.m.  
Blogger Sergio Lara said...

jajaj a mi me consta, el señor tristan es un elegante.

uchale marinita, uchale...

El mundo del blog es chiquito.

enero 25, 2006 3:51 p.m.  
Blogger Tristán said...

No es chiquito, mi SERGE, lo que pasa es que es famosa, jeje. Un abrazo pa la susodicha :D

Thnks thnks, CAMANDEMUN. Pero como son dos toros, es doble abrazo pa Raquel.

enero 25, 2006 9:11 p.m.  
Blogger Lety Ricardez said...

Don Tristán, las damas van primero, nuestra maestra se lleva el primer toro ¿o es más importante el segundo? yo que sé, es tanto lo que no se que para que te digo.
Besos, oye nos vamos el viernes a Puebla, porque no tenemos casa, así amanecemos ahí ¿que les parece?

enero 26, 2006 10:13 a.m.  
Blogger Dra. Kleine said...

Dos! dioses! bien dicen que los pares son mejores.

Una presentación y un bañito termal... oh Chignahuapan de mis recuerdos!

enero 26, 2006 11:24 a.m.  
Blogger Tristán said...

Bueno, MADRE, más bien el post vino según fui teniendo las imágenes. Nada que ver el orden. Al cabo en los dos está la firma de la RACHEL. ... Entonces sí viernes? Va. Por mi hay problem. Al rato le digo al gordo.

Anímese, KLEINE. Vamos.

enero 26, 2006 1:30 p.m.  
Blogger Chipotle said...

Hijole, esto se esta poniendo irremediablemente peligroso y tentador al mismo tiempo... Como dije alguna vez si alguien pregunta por mi diganle que me fui con el último punto...

enero 26, 2006 2:12 p.m.  
Blogger Tristán said...

Cómo?

Todavía la está usted pensando, camarada CHIPOTLE.

Ya, hombre, no se diga más.

Allí lo veo.

enero 26, 2006 8:24 p.m.  
Blogger Tristán said...

Maese, por cierto. No conoces a esta mujer, verdad? Es una delicia, pa chuparse los dedos. Deberíamos ya armar algo, no? Los Cardos y su banda, cómo no! Ajúa.

enero 26, 2006 9:57 p.m.  
Blogger Tristán said...

Jeje, maese. Pues a planear se ha dicho... Por lo pronto, no se anima a lanzarse pa Chigna? Fíjese usted que hay por allá una virgensota, muy sexi la condenada. Bueno, condenada no. Dejémosle en que es una hermosura. Mide cosa de 14 metros, creo, y está labrada en madera. Hay también en Chigna un salto del agua, donde a decir de Rachel un día encontró al espíritu del agua. Allí mismo, junto al río, habrá un lectura. También enumeramos en la experiencia un frío que es una delicia, cala los huesos bien raro, más o menos como cala los escalofríos que dan gusto, o séase que la estancia en Chigna es una eterna suceción de momntos epidérmicos de gallina. Y la niebla, ah! la niebla, como si estuviésemos en Londres (como diría una tía loca que tengo en no sé dónde, creo ques es mi tí, pero bueno, no es lo importante). Supongo que allá en las tierras altas de su patria ha visto el mar de niebla. Bueno, pues yo lo vi en alguna ocasión allá en las Uruapans, en Helvecia (Nebelmehr, le decían), y en otra por allá en la Sierra de Oaxaquita, pero bueno, a lo que voy es que en Chigna el mar de niebla no le pide nada a nadie. Ora imagínese en una cabañita, junto a las barrancas, barrancotas, sentadito con una cafecito con piquete en el porche y observar esa hermosura. Pero bueno, entre otras cosas está el pan de queso, ñam ñam, auqnue supongo que habrá que escogerlo bien y que sea fresquito, jeje, porque una vez mordú uno y me llegó una sensación algo rancita, jeje, hay que decirlo, pues ya qué (se me hace que la vaca al momento de ordeñarla tenía harto frío). Luego encontramos entre sus delicias una cantinucha en la que un día me di una escapada, junto al zócalo. Dejé el hotel de puntitas y órales, me fui con un hermano. Lo que nunca tuve chance de probar es esas cantinas disfrazadas de ferreterías, mercerías, y esas cosas, pero haber si será en esta ocación. Ah!, y lo más importantes sus poetas, sus artistas. Qué Capulina ni qué nada, que es oriundo del lugar. Naaa. Verdaderas personalidades como varios de los cardenches. Y etc etc etc, ya se me cansó el dedo. Ándese. Anímese. Llévese al Tío. Qué dice?

enero 27, 2006 12:04 a.m.  

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